Desde la perspectiva de Chema Portero: ¿te pones demasiados objetivos y te auto agobias?
Hoy Chema nos trae un post que no te dejará indiferente: 🍷El Kaizen es como el buen vino: Te cambia por dentro y te quita el miedo si te dejas
Ya he dicho en varias ocasiones que soy más colaborativa que competitiva y es que colaborando se aprende mucho más, se crece mucho más y se generan muchas más oportunidades.
Precisamente a través de una colaboración es como conocí a
, cuando escribió un artículo para su Newsletter… y a través de esa colaboración, se abrió otra nueva, esta que estáis leyendo. ¡Nunca sabes qué puertas se abren cuando te asomas a una nueva ventana!Hoy os traigo la perspectiva de Chema Portero y de su método para mejorar y no dejar que se te vaya la fuerza por la boca al querer abarcar lo inabarcable. Parece que me hubiera leído el pensamiento y hubiera dicho, Isabel, relaja, cada cosa a su tiempo. Y es que a veces, menos, es más. Y en otras muchas ocasiones, simplificar es la mayor de las sofisticaciones, porque hace que avances más, con foco, dedicado y que cada pequeña victoria te invite a conseguir la siguiente. Porque acción tras acción vienen los resultados inevitables y así evitamos que la ingente cantidad de cosas que nos proponemos hacer nos paralice y nos deje sumidos en un bucle interminable que nos impida avanzar por el desánimo de no conseguir las diez mil quinientas siete tareas que nos hemos puesto para la semana.
No me enrollo más y os dejo con
, que os lo explica infinitamente mejor, y con un ejemplo, como a mí me gusta.🍷El Kaizen es como el buen vino:
Te cambia por dentro y te quita el miedo si te dejas
Estoy comenzando a leer mucho por substack 🔖, me gusta. Descubro gente increíble que me ayuda a cambiar a mejor.
Eso se llama Kaizen, sí cambiar a mejor.
No me da miedo reconocerlo. No sé casi nada. Sigo aprendiendo y aprehendiendo.
Una de esas autoras que me están impactando es Isabel Nogales.
El otro día escribía precisamente sobre este sentimiento, sobre el miedo a exponerse:
“Miedo, quizá, a la crítica tanto mala como buena, miedo a ser escuchada, miedo a destacar en algo”.
Y ese miedo, si te paras a mirarlo, da susto.
Porque nos vamos alejando de los escenarios donde podríamos brillar… por miedo a exponernos.
Y ponemos excusas para no empezar, para no avanzar, del tipo: “es por prudencia”, “es por preservar mi intimidad”, “es que yo soy más de fondo que de forma”.
Pero no.
A veces simplemente es pánico escénico con disfraz de filosofía barata.
Y aquí es donde entra el Kaizen, a romperte los esquemas y la excusitis aguda a exponerse.
Kai… What?
Espera.
Espera.
Mira.
Kaizen (改善) es japonés y se escribe con dos caracteres:
改 (kai) = cambio
善 (zen) = bueno / mejora / bien
Hay quien lo traduce como “Mejora Continua”, así lo aprendí yo en un entorno industrial como en el que trabajo.
Pero he descubierto que su traducción real es “Cambio A Mejor”. Mucho mejor ¿no crees guapips?
El coachee perdido y el vino que quería respirar.
Recuerdo un coachee (cliente de un proceso de coaching) que tras las primeras sesiones salía con una lista de tareas y compromisos tan ambiciosos como la carta de un restaurante con 300 platos.
Pero luego, cuando volvíamos a vernos, las acciones no estaban hechas.
Cero.
Vacío.
Siempre había algo para NO hacer: poco tiempo, mucho lío, excusas con corbata, ¿miedo encubierto a avanzar, a exponerse?
Hasta que un día le solté:
—“Tienes más fugas de energía que una bota de vino vieja. Y lo que no haces, te está drenando más que lo que sí haces.”
Amos a ver.
Es lo que me hubiera gustado soltarle… pero recuerda que practico el Coaching No Directivo. Así que mejor le pregunté, si sabía lo que eran las fugas de energía o FdE cómo me gusta a mí llamarlas. Y cómo no las conocía, luego con su permiso le conté una pequeña historia sobre ellas, y cómo las descubrí yo.
Aquello le sacudió por dentro.
Fue como destapar una barrica de vino que necesitaba respirar: se dio cuenta de que tenía decenas de tareas inconclusas consumiéndole la motivación por goteo.
Así que le propuse algo tan simple que casi le dio la risa:
—“Una acción pequeña. Cada semana. Cierra una fuga. Avanza un paso. Y ya.”
Nada más.
Estilo Kaizen.
Como el vino que no se embotella a gritos, sino que madura despacio, en silencio. Tras 2 sesiones, no es que fuera otro. Era él mismo, pero un poco… digamos… más en movimiento.
Y me dijo algo que se me quedó grabado:
—“Nunca pensé que cerrar mis FdE y hacer menos acciones me haría avanzar tanto.”
Ese día entendió que Kaizen no es correr. Ni cambiar de vida en un fin de semana. Es permitir que el aire entre en tu barrica. Y te transforme.
Poco a poco.
Como debe ser.
“Kaizen (改善) es trabajar para que el paso pequeño de hoy sea la victoria silenciosa de mañana.”
— Chema Portero - Coach CAC por ASESCO -
Kaizen De Cosecha
Porque #Kaizen no te pide un salto al vacío.
Te pide un paso.
Y luego otro.
Y otro más.
Sin estridencias. Sin que nadie aplauda.
Como el buen vino 🍷: madurando en silencio. Y cuando te das cuenta, has cambiado a mejor, te ha cambiado el cuerpo… y el alma.
“El crecimiento real no siempre hace ruido. A veces solo se nota cuando ya no duele lo que antes te frenaba.”
— Chema Portero - Coach CAC por ASESCO -
Y en clave de auto-liderazgo, esto también aplica.
No te lideras mejor por hablarte más. Te lideras cuando por fin escuchas eso que no quieres oír.
Cuando te atreves a mirar dentro y reconocer que llevas años huyendo de algo que merecía ser mostrado. Cuando te atreves a respirar hondo, cómo el buen vino.
Así que, si llevas tiempo conteniéndote, escondiendo tu mensaje o disimulando tu talento, responde a estas preguntas.
Preguntas para ti.
Aquí van unas preguntas al estilo coach (para algo soy Coach):
¿Qué es eso tuyo que no estás mostrando por miedo a que te duela enseñarlo?
¿Qué fuga de energía podrías cerrar esta semana que te está drenando?
¿Qué pequeña acción podrías hacer hoy para acercarte a tu voz real, sin imposturas, simplemente aplicando Kaizen 1 vez a la semana?
¿Qué parte de ti has dejado fuera del juego por pensar que no gustará?
¿Qué ganarías si te lideraras con lo que te hace vulnerable, no solo con lo que te hace fuerte?
No hace falta que te abras en canal.
Basta con aflojar la tapa, dejar que entre aire, que respire lo que guardas dentro.
Porque como bien intuyes, lo que no mostramos no siempre nos protege.
A veces, simplemente… nos apaga.
Y Kaizen es eso: encenderte un poco cada día.
Abrir esa barrica de roble, con un buen vino dentro y que lleva tiempo queriendo respirar… y que otros lo prueben.
En el método LCK ®️ hay cervezas. Por si no te gusta el vino. Es aquí:
Eso sí.
Filosofía Kaizen o método Marie Kondo o lo que quieras aplicar.
Pero…
Empieza hoy.
Sin prisa.
Pero sin pausa.
Y sigue mañana.
¿Quieres saber más de Liderazgo, Coaching y Kaizen?
El método LCK ®️ del que todo el mundo habla (bueno casi todo, algunos, unos pocos afortunados, que te apuntes va…):
Si has disfrutado tanto como yo del artículo que nos regala hoy
arriba tienes el botoncito para suscribir.También le puedes escribir un mensaje directamente, estará encantado de contestarte.
Aplicaré el Kaizen... o, al menos, lo intentaré. 😊